Monday, December 19, 2016

Los pecados de Onán y Judá

Creía que el pecado del onanismo era la masturbación. Pero al releer Génesis 38, me encuentro que el delito de Onán no es la mastubación sino el coitus interruptus: "cuando se llegaba a la mujer de su hermano, vertía en tierra". Y parece que el verdadero delito, más que el uso del método anticonceptivo en sí mismo, es el motivo de su aplicación: "vertía en tierra, por no dar descendencia a su hermano". El onanismo no es masturbación, es negarse a procrear con la viuda de tu hermano. Las cosas han cambiado desde entonces, casarse con la viuda de un hermano, no sé si sería socialmente aceptable hoy en día.

Lo otro que ha cambiado, por suerte, es la posición de la mujer. Las viudas ya no quedan tan desamparadas que tengan que recurrir a acostarse con sus cuñados o sus suegros. Aunque sigue ocurriendo que una misma conducta sexual sea aceptable para un hombre y repudiada para una mujer. Tamar, viuda acusada de fornicar, es condenada a muerte por Judá, también viudo, que la fornicó. Judá, se acuesta con la mujer de sus ¡tres! hijos (desposada con dos y prometida al tercero), pero es Tamar y no Judá, quien corre peligro de muerte.

Si el pecado de Onán es negarle descendencia a su familia por medio de Tamar, entonces Judá comete el mismo pecado al no entregar a su tercer hijo para que se case y se reproduzca con Tamar. Y sin embargo Judá no recibe castigo, Dios no le quita la vida como a Onán. O tal vez sí, tal vez sus pecados sí son castigados: la muerte de su mujer y sus dos hijos.

Saturday, December 17, 2016

Sin prepucios y sin maná

Los días que siguen al cruce del Río Jordán, los primeros días de regreso en la Tierra Prometida, deben haber sido de los más difíciles para el Pueblo de Israel. En muy poco tiempo tienen que sufrir el dolor de la circuncisión, dejar de recibir el beneficio del maná caido del cielo y pasar a procurarse su propia comida. Sin tiempo para acostumbrarse a tanto cambio, también tienen que prepararse para la guerra.

Varios símbolos que representan el renacimiento del pueblo en Josué 5:
  • El cruce del Río Jordán como un nuevo parto. Salen de las aguas que se abren, así cómo el niño sale del vientre de la madre.
  • La circuncisión masiva. Así cómo a los pocos días del nacimiento el niño varón es circuncidado, después del renacimiento del pueblo al cruzar el Jordán, el pueblo en su conjunto debe practicar la circuncisión. Se completa así también el relevo entre generaciones, la genración que salió de Egipto circuncisa y que pereció en el desierto, y la nueva geenración, el nuevo Pueblo de Israel, que se circuncida al entrar de nuevo a la vieja patria.
  • Se detiene el maná. El Pueblo recién renacido, también alcanza su independencia, ya no recibe su alimento sin esfuerzo como un bebé alimentado directamente por el cordón umbilical.
  • La Fiesta de Pesaj. Qué mejor momento para celebrar la Fiesta de la Libertad.

Suena como demasiada carga en tan poco tiempo. Pero es en realidad la culminación de un proceso que empieza con la salida de Egipto y continúa durante cuarenta años en el desierto. Se puede ver como un nuevo nacimiento, pero también se puede ver como una ceremonia de graduación, de llegada a la madurez. El esclavo es por fin un hombre nuevo, un hombre libre e independiente. La libertad no la consigue al salir de Egipto sino al llegar a la Tierra de Israel.

Esfuérzate y sé valiente

La frase "esfuérzate y sé valiente" aparece cuatro veces en Josué 1, tres veces se la dice Dios a Josué y al final una cuarta vez se la dice el pueblo a Josué. Son las instrucciones para cruzar el Río Jordán, para llevar finalmente al Pueblo de Israel de regreso a la Tierra de Israel, para hacer "aliá".

Me pregunto cuantos janijim de Hashomer Hatzair y otras tunot noar que repiten la misma frase en hebreo, jazak veematz, conocen el origen bíblico de la misma. Interesante como un movimiento tan laico y a veces hasta anti-religioso, como Hashomer Hatzair, sin que sus miembros lo sepan, toma del Tanaj un elemento tan central para la tnuá. Qué dirían los madrijim y janijim, al saber que cada vez que repiten jazak veematz, están repitiendo nada menos que un mandato divino. Tal vez repetir esa frase encaje mejor con la ideología de Bnei Hakiva.

De cualquier modo, es una frase que queda muy bonita para incentivar a la Aliá. Para conectar el actual regreso de Am Israel a Eretz Israel en la actualidad, con otros momentos de la historia del pueblo judío, para establecer una narrativa de continuidad de nuestra historia.